No a la incitación al odio y la violencia

No a la incitación al odio y la violencia

Víctor Rodríguez C. La incitación al odio y a la violencia ha estado siempre detrás de las grandes crisis humanitarias y de los genocidios y guerras atroces que han atormentado a la humanidad y que han dejado millones de muertos y desplazados en el mundo. En 1991, la...
El libro de la asfixia

El libro de la asfixia

Publicado en septiembre de 2007
Nelson Rivera
Publicado en Papel Literario
Su lógica intrínseca es concentracionaria. Su propósito: vaciar a los ciudadanos de su condición. Hannah Arendt, Giorgio Agamben, Michel Foucault, Emmanuel Levinas y David Rousset: estos son algunos de los pensadores post Auschwitz que ofrecen herramientas de lectura para desentrañar el dispositivo totalitario.
Hitler y Stalin: modelos para pensar

Hitler y Stalin: modelos para pensar

Publicado en julio de 2007
Nelson Rivera
Publicado en Papel Literario
Son historiadores especializados en las figuras de Hitler y Stalin. Han publicado libros imprescindibles. Richard Overy es también autor del fascinante Por qué ganaron los aliados. John Lukacs, por su parte, ha publicado Cinco días en Londres, mayo de 1940. Churchill solo frente a Hitler, ensayo que atrapa por su imperturbable tensión narrativa.
Cultura y totalitarismo: Afirmación o negación de la persona

Cultura y totalitarismo: Afirmación o negación de la persona

Publicado en marzo de 2007
María Elena Ramos

1- Desavenencias connaturales entre cultura y autoritarismo.

Primera desavenencia

-La cultura requiere la armonía. Tomemos una buena obra de arte. Vemos que su complejidad y su maravilla radican en buena parte en la coexistencia de los contrarios. En pintura o escultura vemos la tensión que crean los opuestos: luz y sombra, lo plano y lo profundo, la quietud y el movimiento. En la novela o la pieza teatral crecen las diferencias, el bien y el mal protagonizan, el amor y el odio tejen la trama. No existiría el espacio dramático si no estuvieran allí, y radicalizados, los opuestos. Y en la sinfonía musical los acordes consonantes conviven con los disonantes.