Antonio Pasquali
En 1961 ingresé a la escuela de filosofía de la Universidad Central de Venezuela. Tuve el privilegio de ser alumno de notables profesores, uno de ellos Antonio Pasquali. Entonces dictaba el seminario de filosofía griega, concentrado en la «Ética nicomaquea» de Aristóteles. Fueron sesiones de trabajo maravillosas, con el texto aristotélico en las manos y el talento crítico de Antonio para escudriñarlo y relacionarlo con el pensamiento de la época, incluyendo a los trágicos, en particular a Eurípides. Sus clases fueron determinantes para mi interés casi exclusivo en la Grecia del siglo V a. C.
A lo largo de los años logré su amistad, y compartí con él su celo por una televisión independiente.
Antonio Pasquali es y será uno de los grandes humanistas de la Venezuela contemporánea. Su pensamiento democrático debe ser guía en estos tiempos tormentosos.
A sus hijas, mi más sentido pésame.
Leonardo Azparren
Miembro del Consejo de Honor del Observatorio Hannah Arendt
